III MEDIA MARATON CANAL DE CASTILLA. CIUDAD DE DUEÑAS.-
“La nieve”
El día me depararía bastantes sorpresas.
Dormí en casa de mis primos en un pueblo de Segovia y cuando me levanté me llevé la primera sorpresa: El suelo estaba blanco y nevaba copiosamente. Los copos no eran muy grandes pero sí eran muy abundantes.
Mi primo Mauri ya me esperaba desayunando y tras pocas dudas decidimos salir para Dueñas. Limpiamos los aprox 6cm de nieve que había en el parabrisas y el blanco meteoro nos acompañó hasta la entrada en la provincia de Burgos a partir de donde empezó a mutar en agua, agua-nieve o nieve según variaba la cota.
En Dueñas llovía, aunque al empezar la carrera escampó.
Espera de 20 minutos para la recogida del dorsal y pronto otra sorpresa:
Una persona, se armó con el micrófono y comunicó que la carrera se retrasa unos 10 minutos que se convirtieron en 30 minutos. No habia llegado la ambulancia. Increíble.
Me dio tiempo a estirar como nunca, bien abrigado, pero corredores en tirantes o manga corta pasaron, debido al frio, un rato desagradable.
También desagradable y sorprendente fue lo sucedido cuando un corredor aterido de frío preguntó, educadamente, a una mujer de la organización si no llegaban las ambulancias. Esta, le contesto-espetó-ladró que ella asumía la responsabilidad del error pero como ya le habían dado la bolsa del corredor, se podia marchar sin correr, porque a ella eso no la importaba. Nunca había oido algo así de alguien de la organización. Quiero pensar que estaba nerviosa porque las cosas no empezaban bien, pero eso no es motivo para perder las formas.
Con 30 minutos de retraso y sin lluvia se dio la salida y retomé aquella manía de ser el último en echar a correr.
Los primeros metros fueron por Dueñas, con algún grupito de eldanenses y/o visitantes animando con pocas ganas.
Rápido otra sorpresa: La carrera discurriría por camino de grava y no lo suficientemente pisada, ya que había piedras sueltas.
El km 3 paso en casi 16 minutos: bastante mejor de lo esperado. Estábamos empezando.
En el km 4- km 5 charla con dos corredoras tan simpáticas como guapas que se inició cuando las iba a adelantar y me preguntaron algo. Otra sorpresa.
En el km 7 empieza a llover y me puse el cortavientos, que me habia atado a la cintura un rato antes. La lluvía, en algún momento, con intensidad nos acompañó hasta casi el final de prueba.
En el km 10: un tiempo de 51 minutos y algún kilómetro por debajo de la barrera psicológica de 5 min/ km. Sorpresón, pero quedaba mucho.
En Villamuriel de Cerrato se daba la vuelta, cruzando el Canal de Castilla y volviendo a Dueñas.
Los kilómetros caían y casi todos iba en soledad; había pocos corredores y tanto los que me precedian como los que iban detrás íban lejos y con ritmos parecidos al mio.
En el km 12 aprox. Saltan todas las alarmas. Dolor raro, desconocido, poco familiar y sensación de quemazón en la planta del pie fatídico y “fascitico” Me fui repitiendo “no me jodas”, “no me jodas” yo solo en un buen tramo.
En el km 18 aprox, vi la luz. No fue por una aparición mística propia del la Semana Santa, ni que apareciera el sol entre las nubes. ¿Sería una ampolla lo de la planta del pie? Por la sensación que tenia podía serlo.
En el km 20 cuesta importante para subir a Dueñas y en meta otra sorpresa.
Paso bajo la pancarta y paro. El escaso personal allí concurrido me indica que siga. No lo entiendo: no estorbo a nadie que entre después y estoy bastante cansado. Rápidamente entiendo lo que pasa cuando a unos 30 metros de donde estaba veo a unos señores uniformados con papeles, bolis y cronómetros que me llaman hacia ellos. Arranco con rabia, para al final entrar en 1h 46min 50seg. Esta es una gran sorpresa: casi 11 minutos menos que Segovia ¿Estará mal medida?
Espero que no estuviera mal medida. Había jueces y el indicarme a completar esos últimos 30 metros me hace pensar que alguien se había molestado en medirla con cierto criterio.
Agua y fruta en meta y rápidamente a la ducha que estaba empapado y hacía frío.
Nunca me había alegrado tanto de ver una mega ampolla al descalzarme. No era una recaida de la fascitis.
¿Y la pierna?¿Y el gemelo? Pues al principio si que me molestó pero entre la lluvia y la “deseada” ampolla no me acordé de ella. ¿O quizá estas molestias ya lo voy asumiendo como algo normal? No debe ser así. No debemos echarnos cargas por no querer parar a pensar y cambiar para solucionar algo que al final es mejor empezar de cero. Esto pasa en muchas cosas en la vida y tambien en mi caso runero. En otra entrada lo analizaremos porque me lo estoy pensando.
CONCLUSIONES DE LA CARRERA.-
- Carrera llana, con un solo repecho en el km 20
- Casi todo el recorrido va por grava, no muy pisada con piedras sueltas.
- Recorrido feo y monótono. A la izquierda el Canal de Castilla y a la derecha árboles, arbustos o tierra de labor.
- Espera para recoger el dorsal siendo pocos corredores
- Animación casi inexistente. El tiempo no acompaña y el recorrido tampoco.
- Bolsa del corredor, avituallamientos y servicios en meta justitos.
- Carrera barata (5 Euros) y la posibilidad de inscribirse hasta el mismo día de la prueba por 10 Euros.
- Mal indicada la llegada a meta.
- Duchas muy lejos de la entrada a meta, que con el frío es desagradable.
CONCLUSIONES PERSONALES.-
- Tiempazo en meta que no me esperaba. Insisto: tengo dudas de si estará bien medida.
- Sensaciones buenas y mis molestias van mejorando, aunque aparecen nuevas putaditas (ampolla)
- Sigue la preparación para Praga sin parar.
Muchas gracias a mi primo Mauri por su compañía. Creo que al final serás mi managerNo ganaremos mucho pero lo pasamos bien.