FALTA POQUITO.-
Si Dios quiere, en unas horas estaremos en Paris, y en menos de tres días estaremos correteando por sus calles.
Mis objetivos no cambian: acabar y si pudiera ser bajar de 4 horas sería ideal. No he entrenado mucho por diversos acontecimientos en este año y no llevo buena preparación. Mi mente tampoco está muy centrada, aunque con la compañía de Raquel y el ambiente que se vivirá en los días previos, rápidamente me meteré en ambiente y pensaré menos en otras historias.
Espero que mi cuerpo tenga “memoria maratoniana” y sepa actuar sabiendo lo que le va a tocar.
Asimismo espero no sufrir mucho aunque me costará llegar a la meta, pero estoy seguro que ese sufrimiento será infinitamente menor a la satisfacción cuando recoja mi medalla.
También quiero disfrutar con Raquel de esa ciudad, que no conozco y mucha gente me dice que es maravillosa, por eso vamos unos días antes y venimos otros después.
Por si alguien tiene interés en seguir mis evoluciones, la organización ha creado una aplicación para el seguimiento de los pasos intermedios de cada corredor. Se llama Paris Marathon 2015.
En cualquier caso en la próxima entrada os contaré mis andanzas por tierras galas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario