LLEVAMOS UN MES

LLEVAMOS UN MES.-

     Ayer hizo un mes que empecé el plan de entrenamiento que encaminará mi cuerpo y mi mente al Maratón de Berlín el 29 de Septiembre.

     Han sido 31 días con sensaciones dispares.

     Al principio empecé muy animado e ilusionado pero consciente que llegarían días duros. Estos días peores llegaron pronto. Compaginar los tres días semanales de natación con los cuatro de correr me empezó a agobiar, tanto física como mentalmente. Había días que tenía que salir a entrenar de madrugada y otros que corría antes de ir a nadar, con lo que la paliza era notable. Esas semanas no me gustaron, pero completaba los entrenamientos con más pena que gloria esperando días mejores.

     Los últimos entrenamientos me han dejado mejor sabor de boca. Aún estoy lejos del estado de forma que tenía en mi “época dorada” como corredor popular, hace 2-3 años, pero veo progresos. En época de notas estudiantiles podemos decir que P.A. que era con lo que habitualmente nos calificaban en EGB y que venía a significar Progresa Adecuadamente. Voy mejorando los ritmos en las tiradas largas y acabo con mejores sensaciones.

     En alguien tan anárquico como yo un plan de entrenamiento supone un proceso de altibajos, de luces y sombras, así que supongo que volverá a haber bajones y aún más en días de mucho calor, pero tendré que obligarme  completar los entrenamientos que al final los resultados se verán. O eso espero